domingo, 4 de diciembre de 2011

Aquí llego yo, con un toque de literatura


Me siento incapaz de escribir. No sé si será por intentar forzarme para llegar a un plazo determinado o porque no tengo tiempo ni de poner mis ideas en orden. Incluso puede ser que tengo hambre y el rugido de mis tripas tapa la melodía de las letras que rebotan por toda la habitación. Suelo juntar palabras que resultan ser una mini-historia de unos 2000 – 3000  caracteres con buena aceptación de un público escaso pero muy selecto.

¿Y qué hago yo en estos casos? Normalmente guardo algo de lo que he escrito —si es que he escrito algo— por si alguna vez me apetece recuperarlo y sacarlo a la luz —cosa que nunca sucede—. Pero esta vez no, ahora toca escribir algo. Me comprometí y debo cumplirlo.
¡Música, eso es! ¡La música siempre me inspira! Veamos… Beethoven, Tiersen, Morente… Siempre los mismos pero los únicos que me ayudan a sacar lo que tengo dentro.

Me acabo de dar cuenta de algo con la última frase. Quizás me siento incapaz de escribir porque no tengo nada dentro. Vale, puede parecer absurdo pero… ¿y si es cierto? ¿Y si he llegado a escribir tanto durante los primeros y últimos diecinueve años que ya se me ha agotado todo? ¿Y si me queda una vida por delante (larga o corta, ¿qué más da?) sin la escritura? Uh… mal rollo. No me gusta nada esa idea. Lo mejor será ponerse ya con algo.

Vaya, ahora que miro hacia arriba veo que hacerte empezar a leer algo y que le cojas las ganas va a ser complicado porque me he dedicado a contarte cosas que quizás ni te interesan. Será mejor dejarlo para otro momento en que yo esté más inspirado y tú más predispuesto a leerme, ahora que ya me conoces un poco.

¡Por cierto! Que descortés soy… Mi nombre es Carlos y espero que nos volvamos a ver por aquí en poco tiempo.   

1 comentario:

  1. Jajaja, me ha gustado mucho. La cuestión es qué escribir, y nadie nos hemos planteado que podemos escribir sobre nada, eso, ¡NADA! Escribir, escribir y seguir escribiendo, sin tener un tema concreto, sin saber muy bien qué poner, pero a la vez cuidando las palabras, seleccionándolo para que todo quede perfecto. Y sacar una conclusión, tener un texto considerable, entretenido y por qué no decirlo, divertido.
    Mis felicitaciones. Para la próxima te deseo inspiración, pero oye, ¡no cambies!
    @Javier_Piris

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