jueves, 8 de diciembre de 2011

Cuernos.

Ay, los cuernos… qué cosa más bonita de disfrutar si tú no eres al que convierten en un carnero cualquiera. Porque otra cosa no, pero mentir sin ser pillado le gusta a todo el mundo, y quien diga que no miente… ay, qué gracia.

Peor aún, hay que ser tonto para saber que te ponen los cuernos y no vengarte. Queridos lectores, ¿qué venganza usaríais contra vuestra pareja si se atrevieran a ponéroslos bien puestos? ¿Quizá alguna maldición de la Pitonisa Reynolds o le llenaríais de orín el botecito de colonia que la cateta de su madre le regaló y que es del todo a un euro? ¡Quiero colaboración, cojones!

Y eso no es lo peor, todavía hay algo que lo supera: Dedicarle un videoclip contando la historia. Que hay que ser tonta, Nicola. El patito feo de las Girls Aloud que ha sacado el disco más redondo en solitario de sus compañeras tiene ya tercer single. Una de sus canciones más potentes, Yo-yo.  Sí. Se llama como el juguete que nadie sabía usar de pequeños y que ahora nos inventamos historias sobre las piruetas que hacíamos para dárnoslas de importantes. ¡JA!  
En fin, que la cantante que nació con tipp-ex en vez de piel ha sacado este temazo y merece, al menos, un minuto de atención.




¿Qué quién soy yo? Pues podéis conocerme como Conan Uve o Conan von Beddmarr o como os dé la gana, pero seguramente os responderé por Conan Uve, redactor (más que nada musical, aunque puede que os escriba cualquier cosa que se me ocurra) de este blog gracias a la gran musa del destape que es Estela Reynolds. Gracias por vuestra atención y pronto ¡más!

No hay comentarios:

Publicar un comentario